Entrevista a Juan Andrés Fontaine

El Consejero de Libertad y Desarrollo advierte que el inminente incremento a 20% en el impuesto a las empresas desalentará el ahorro privado y fomentará el endeudamiento, lo que –afirma– no es sano para el crecimiento del PIB.

—Usted ha sido contrario a elevar a 20% el impuesto a las empresas, ¿qué efectos tendría este inminente ajuste?
—Prefiero no referirme en detalle al proyecto de reforma porque no lo conozco, pero hay un amplio consenso de que con un alza en el tributo a las empresas, si bien se recauda más, desalienta el ahorro, el que constituye dos tercios del total. Elevar la carga en tal ámbito suele afectar la capacidad de inversión, en especial, de las compañías de menor escala. Las grandes tienen la posibilidad de financiar sus inversiones con créditos, emisiones de acciones o de bonos; en cambio, las Pymes, e incluso aquellas que exhiben ventas algo por encima de las UF100.000, dependen de su capacidad interna de fondos.

—¿Se estaría fomentando el endeudamiento?
—Así es, y no es sano. El grueso del crecimiento económico debiera financiarse con ahorro y no con endeudamiento; este último es un complemento importante, pero no es conveniente extremar su utilización. Un aumento tributario de este tipo es atendible si es que el uso de los mayores recursos está muy bien justificado, lo que yo, hasta el momento, no he visto.

—Desde el gobierno se argumenta que se destinarán a mejorar la Educación…
—No conozco los proyectos en esa área que se pretenden activar con esta reforma y tampoco se han planteado otras fuentes posibles de financiamiento. Cuando simultáneamente se están discutiendo los subsidios al Transantiago y los subsidios espejo a regiones, uno se pregunta cuál será efectivamente el fin de estos recursos.

—¿Tiene dudas respecto al objetivo de esta reforma?
—La única manera de responder eso es que se haga una presentación completa sobre cómo cambió el panorama fiscal en relación a la exposición que hizo la directora de Presupuestos, a propósito del erario para este ejercicio.

Alcance limitado

—Con todo, se estaría contemplando la eliminación de gravámenes como el de timbres y estampillas…
—Revisarlo es positivo, pero ya estamos en una tasa (0,6%) cuyo grado de ineficiencia en la asignación de recursos es relativamente bajo.

—¿Le parecería adecuado acercar las tasas de impuesto de primera y segunda categoría e, incluso el IVA, como lo sugieren algunos economistas?
—En términos abstractos, sería partidario de ir rebajando de manera gradual el tributo desde los estratos más altos, pero no creo que eso haga una gran diferencia considerando que el 82% de los contribuyentes está exento.

Impulso competitivo

—Según cálculos de la CCS, la productividad total de factores (PTF) cayó 0,7% en 2011 y este año marcaría una variación nula, ¿por qué ha costado tanto recuperarnos en ese ámbito?
—La PTF responde a un concepto muy complejo que admite las más diversas mediciones. Ahora bien, estimaciones preliminares dan cuenta de un freno en la caída o leve ascenso desde 2010, tendencia que debiera continuar en los años siguientes en función del empuje al emprendimiento.

—¿Logrará esta administración concluir su período con un alza de 1%, como se planteó originalmente?
—No está asegurado, pero al menos hay señales auspiciosas asociadas a la capacidad de crecimiento económico y el fuerte impulso de la inversión –local y extranjera–, en particular, en nuevas tecnologías durante los últimos dos años.

—¿Se ha avanzado con suficiente celeridad en la Agenda de Impulso Competitivo (AIC)?
—La elaboración de las medidas y la presentación de las reformas pertinentes han avanzado a buen ritmo. El Presidente planteó en mayo pasado la meta de tener presentadas las 50 iniciativas originales del plan antes del 21 del próximo mes; queda poco tiempo para cumplirlo, pero es perfectamente posible estar cerca de ese exigente objetivo.

—Usted se refiere a la presentación de las medidas; lo importante, sin embargo, es la implementación de estas, ¿no le parece?
—Es cierto, y viene un largo y tortuoso proceso de tramitación en el Congreso para alrededor de la mitad de la agenda. En tal sentido, insto a las autoridades correspondientes, ministros de las distintas carteras involucradas, a poner todo de su parte para sacar adelante esas leyes, sin lo cual no tendremos los efectos esperados en productividad.

Fuente: Entrevista realizada por el Diario Estrategia (Chile), 27 de Abril de 2012.