Impeachment: la pelea de Dilma en el Congreso
La Cámara de Diputados ya aprobó ayer la creación de una comisión especial de juicio polÃtico que será la encargada de emitir un parecer sobre los fundamentos a favor del proceso de impeachment de Dilma Rousseff (del Partido de los Trabajadores). La base legal que se esgrime es el «crimen de responsabilidad» que habrÃa cometido la presidenta al adulterar las cuentas públicas para esconder el déficit público en su primer mandato y el año pasado.
La presidenta tiene que ser ahora notificada de la apertura del proceso y contará con diez sesiones en la Cámara para presentar su defensa. Luego, la comisión tendrá otras cinco sesiones de debate e inmediatamente después tendrá que someter a votación del plenario su parecer.
Se requerirán dos tercios de los diputados (342 votos de los 513) para que el impeachment sea aprobado; si esto sucede, la presidenta será apartada de su cargo por hasta 180 dÃas mientras el Senado evalúa el caso; el vicepresidente, Michel Temer, (PMDB) asumirÃa temporalmente el poder.
Anulación de mandato: vÃa para nuevos comicios
El Tribunal Superior Electoral (TSE) analiza ya denuncias presentadas por la oposición de supuestos abusos económicos y polÃticos del gobierno en la campaña para la reelección en 2014, entre ellos el financiamiento ilegal a través de fondos desviados del esquema de corrupción en Petrobras.
Esta corte no está sometida a un plazo, pero de su sentencia dependen tanto Dilma Rousseff como Michel Temer, que componÃan la fórmula de la coalición liderada por el PT y el PMDB. Si se encuentran pruebas condenatorias, el mandato de ambos serÃa inmediatamente anulado.
En ese escenario, asumirÃa el poder el presidente de la Cámara de Diputados, que deberÃa llamar a elecciones dentro de los 90 dÃas para elegir un reemplazante. Si la anulación ocurriera antes de la mitad del mandato (es decir, el 31 de diciembre de este año), se convocarÃa a comicios abiertos; si fuera después de ese plazo, el sucesor serÃa elegido indirectamente, entre los miembros del Congreso.
Renuncia: la salida más rápida y menos traumática
Frente a la grave crisis polÃtica, la recesión económica, las denuncias de corrupción y la epidemia del virus zika, la presidenta podrÃa elegir renunciar a su cargo, como se lo reclama el clamor popular en las calles. Algunos analistas consideran que serÃa una salida noble, y la más rápida y menos traumática vÃa que permitirÃa comenzar a buscar soluciones a la compleja situación que vive Brasil. Le permitirÃa al paÃs aplacar el tenso ambiente que respira hoy para que en agosto puedan realizarse en calma los Juegos OlÃmpicos en RÃo, que atraerán mucha atención internacional.
En caso de una renuncia de la presidenta, asumirÃa el poder el vicepresidente, Michel Temer, que deberÃa cumplir el resto del mandato y probablemente conformarÃa un gobierno de unidad nacional para superar los problemas que vive el paÃs.
Fue el camino que eligió el presidente Fernando Collor de Mello en 1992, cuando jaqueado por un impeachment que ya habÃa dado sus primeros pasos en el Congreso, decidió abandonar el cargo.
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