Nicaragua: Elecciones Regionales en Nicaragua bajo un ambiente de desconfianza

Los ciudadanos de las dos regiones autónomas del caribe nicaragüense, la del Norte y la del Sur, elegirán a los 45 diputados de sus respectivos Concejos el 7 de marzo, en medio de la desconfianza de los partidos de oposición sobre el sistema imperante, ya que desde 2008 han denunciado a las autoridades del Poder Electoral de cometer un fraude a favor del oficialista Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), lo cual provocó el congelamiento o suspensión total del apoyo presupuestario y otros proyectos de cooperación.

Líderes del caribe y diputados liberales han denunciado que en el caribe existe gran falsificación y duplicación de documentos de votación (conocidos como cédulas).

Además, que el Poder Electoral se ha encargado de entregar las cédulas originales únicamente a los simpatizantes del gobernante FSLN.

El caribe nicaragüense, integrado por la Región Autónoma del Atlántico Norte (RAAN) y la Región Autónoma del Atlántico Sur (RAAS), cubre aproximadamente la mitad de los 130 mil kilómetros cuadrados que tiene el territorio nicaragüense, pero sus habitantes viven en condiciones más lamentables que las personas del pacífico.

Para los sextos comicios regionales del caribe están aptos para ejercer el voto un poco más de 270 mil personas, según las autoridades. En la RAAN elegirán a 45 diputados y en la RAAS a otros 45.

Sin embargo, los partidos opositores han denunciado al Poder Electoral y al gobernante FSLN de alistar un nuevo fraude.

El Partido Liberal Independiente – Vamos con Eduardo es una de las organizaciones que disputará los noventa escaños de los dos Concejos regionales del caribe, en una coalición con la Alianza Liberal Nicaragüense (ALN) y el regional Partido Movimiento de Unidad Costeña (PAMUC).

En la contienda también están el oficialista FSLN, Partido Liberal Constitucionalista (PLC), Unión Demócrata Cristiana (UDC), Movimiento de Unidad Cristiana (MUC) y la organización regional Yatama (Hijos de la Madre Tierra, en mískito).

Representantes de la Unión Europea en Nicaragua, como Mendel Goldstein, han dicho que para ellos es importante que los comicios sean transparentes y honestos.

Voceros de los partidos de oposición, sin embargo, han denunciado desde finales del año pasado que las autoridades electorales regionales están favoreciendo únicamente a los simpatizantes del FSLN en la entrega de documentos para ejercer el voto.

Las autoridades han guardado silencio en torno a las denuncias, en el caribe, y en Managua niegan las anomalías, pero no convencen a los partidos políticos opositores.

Para causar más desconfianza, el Poder Electoral tampoco acreditó para observar los comicios del caribe a las organizaciones Ética y Transparencia e Ipade, pese a que representantes de ambas instituciones han dicho que desean participar.

La Unión Europea sí recibió una invitación de parte de las autoridades electorales, para participar como observadores. Se espera que la Unión Europea envíe a una misión técnica para el día de las votaciones, el 7 de marzo de 2010.
LOS PROBLEMAS DEL CARIBE

El caribe nicaragüense cubre un gran territorio, pero tiene baja densidad poblacional.

Es una zona golpeada por la pobreza, el analfabetismo y los desastres naturales, especialmente huracanes (Beta en 2005, Félix en 2007 e Ida en 2009).

Asimismo, la población de esas zonas tiene poco acceso a los servicios básicos y no hay carreteras que la conecten decentemente con el pacífico.

La RAAN y la RAAS tienen su Ley de Autonomía, pero los dirigentes caribeños han acusado a los presidentes de turno de no respetarla o de ni siquiera tomarla en cuenta al momento de tomar decisiones de nación.

En los últimos meses las autoridades policiales y militares han admitido que el narcotráfico tiene gran influencia y hasta el control completo de algunas zonas del caribe.

En diciembre de 2009, dos militares murieron en un enfrentamiento contra los narcotraficantes, en la comunidad de Walpasiksa (Piedra Negra, en lengua mískita), en la RAAN, una «narco comunidad» donde viven aproximadamente 1,500 personas, según admitieron a los medios de comunicación algunos lugareños, quienes explicaron que la moneda en esa zona es el dólar de Estados Unidos y no el córdoba de Nicaragua.

«Los pobladores mískitos y otros nicaragüenses en el caribe y en el pacífico son víctimas del narcotráfico, igualmente sucede con funcionarios, militares y políticos honrados, quienes han ofrendado sus vidas en cumplimiento del deber patriótico, ellos y todos los nicaragüenses somos víctimas de la irresponsabilidad gubernamental, que nos ha dejado a merced de los narcos», denunció en diciembre el coronel en retiroVíctor Boitano, quien durante seis años fue el jefe del destacamento militar en la RAAN.

La comunidad de Walpasiksa, controlada ahora por efectivos del Ejército de Nicaragua y de la Policía Nacional, había caído en manos de los narcotraficantes, quienes se habían presentado como empresarios, pocos años atrás, y habían desarrollado la infraestructura en una zona abandonada y sumida en la pobreza.

El ex vicepresidente de Nicaragua, Sergio Ramírez, declaró a finales de 2009 que el control que los narcotraficantes han logrado en el caribe podría desembocar en una exigencia de independencia del resto de Nicaragua, dentro de algunos años, si es que las autoridades no recapacitan desde ahora para combatir al crimen organizado y la pobreza.

Asimismo, cabe señalar que organizaciones protectoras del medio ambiente dieron a conocer que más de 20 mil hectáreas de la Reserva de Biosfera Bosawas (en la RAAN) han sido vendidas ilegalmente y podrían desaparecer en cuestión de semanas. Bosawas es la principal reserva de bosques que tiene Nicaragua. Las autoridades no han respondido a la grave denuncia.

La venta ilegal de bosques estaría siendo dirigida por funcionarios del Concejo Regional de la RAAN, según aseveró un diputado de la Asamblea Nacional de Nicaragua.

Es en ese ambiente de desconfianza hacia las autoridades electorales, enormes niveles de pobreza y gran influencia de parte de los narcotraficantes, que los ciudadanos del Caribe asistirán a las 983 mesas electorales el próximo 7 de marzo, para elegir a sus 90 diputados regionales.

 

 

…………………..

Fuente: Fundación Friedrich Naumann